Las mascaras son inútiles cuando tratas de ocultarte y protegerte de ti mismo. No puedes fingir ser o sentir algo si al fin y al cabo solo le mientes al verdadero deseo oculto en ti, eso que solo a ti te importa porque solo a ti te debe hacer feliz.
Debería trajinar mas seguido mi blog y mis entradas antiguas. Tienen tantas historias de mi, que con algunas me tapo los ojos. Ahora, de que me ha ayudado empezar a escribir sin parar? 100% a encontrarme conmigo mismo, ver lo que pensé y sentí en aquellos momentos que me han formado. Realmente es bueno todo esto de "expresar los pensamientos" sin quitarle la cualidad de que sea algo "personal", aunque admito que tengo tanto poder mental sobre mi que soy capaz de lograr que algunas cosas del corazón no lleguen ni a la cabeza. Es casi igual a no sentirlas.
No entiendo porque hay gente que espera que otras cambien si en este mundo tu puedes procrear personas. De que se trata? Bueno, no estoy diciendo que hay que ser mediocre, solo que nadie conoce a todo el mundo como para juzgar quien es el mejor o el peor del orbe. Las cosas no cambian, se transforman y solo te puedes arrepentir en esta vida, no en otra aunque la hubiese.
A veces soy tan hueón que agradezco tener mala memoria, pero estoy seguro de que muchos envidiarían eso de mi si lo tuviesen un día. Realmente soy duro, difícil de tratar y mantener. Al fin y al cabo nadie me conoce, ni yo porque no recuerdo como era ayer.
Mañana a clases.... uff... desde mañana se vera que tan gallo era. Menos diversión, mas estrés, falta de apoyo y nuevas necesidades... Suerte fabianni.
En un lenguaje con tantas palabras como lo es el español, debe ser complicado saber interpretar o entender algunas palabras para cierto grupo de personas. Yo creo que es fundamental conocer el vocabulario por último para saber que se esta haciendo. Como por ejemplo personas que no conocen la palabra "intimidad"; No saben cuidar su privacidad con respeto y cautela sino que hacen de todo un show público, como también mienten, haciéndose intima amiga de quien deshuesaban, hinchaban la oreja de tanto pelarla y que mas encima era causa de elevar la temperatura de su cabeza como si fuera equivalente a un ají en el trasero, pero aun así se ríe todos los días con ella y ahora es su intima. No conocer el vocabulario te hace bastante falso al parecer.
Los zapatos caminaron vacíos en busca de dos pies. La camiseta, fría y enferma, quedó enredada en el tendero por el viento sin lograr llenar el vacío de su pecho. El reloj de pulsera no supo doblar su cuerpo sin una muñeca. Las gafas abrazadas nunca vieron los ojos ausentes. El preservativo se arrugó y no encontró la hormiga de su pene. Las ruedas olvidaron rodar, tumbadas, desenganchadas del eje de una bicicleta. El sombrero quedó colgado, atrapado, sin el tacto de los pensamientos. El único libro fue olvidado y nadie despegó sus páginas. El último bolígrafo no supo cómo volver a ponerse de pie. Tampoco las teclas se movieron, tristes, a la espera de la yema de unos dedos. Todos los objetos eran una fila desordenada de una búsqueda. En ella yo, otro objeto perdido. Ayer, dejé de buscar tu ausencia.